El paso de los años y el poco cuidado de los materiales, hace que se produzca un deterioro que puede parecer irreparable, pero que en la mayoría de los casos se logra recuperar.

Para realizar un plastificado de pisos de madera siempre es necesario efectuar previamente un pulido minucioso para lograr buenos resultados y que sean duraderos.

Los plastificados se pueden hacer en cualquier tipo de de madera:

– parquet
– mosaicos de madera
– tablones
– piso flotante
– tarugados
– decks

Los pulidos bien efectuados son fundamentales, ya que si no se realiza de buena manera va a generar problemas posteriores al momentos de plastificar el piso

Lo más normal es llevar adelante un pulido a máquina, lo cual consiste en pasar 4 tipos de lijas diferentes, comenzando con una lija gruesa la cual se encarga de quitar restos de materiales y nivelar la madera.

La segunda lija es la mediana, la cual quita las posibles rayas que hayan quedado y las manchas más importantes.

Por último se pasan las lijas finas y súper finas, suavizando la madera y dejando tapados absolutamente todos los poros.

Una vez terminado el proceso de pulido es necesaria un limpieza perfecta del material para poder plastificar y que no queden marcas, lo que simplemente se puede hacer aplicando agua y jabón con mucho cuidado de no dejar restos ni residuos.

Una vez que se realiza el plastificado de pisos se debe evitar transitar sobre ellos, ya que los materiales que se aplican demoran algunas horas en absorberse completamente, por lo que si no se respeta se pueden quedar marcas para siempre.

Además es importante tener en cuenta que los materiales que se usan tienen algún contenido tóxico, por lo que es nocivo estar en contacto directo.

¿Cómo limpiar después del plastificado de pisos de madera?

Si bien la mayoría de las empresas que se dedican a plastificar pisos recomiendan no pisar por un período de 3 horas, siempre es mejor esperar al menos 24 horas y dejar ventilando el lugar para evitar intoxicaciones.

El método conocido como hidrolaqueado es el más recomendable, ya que este no contiene ningún tipo de toxinas y logra los mismos resultados.

Una vez que se ha culminado el plastificado de pisos, se debe tener especial cuidado en los materiales que se usan para su limpieza.

Las primeras dos semanas se recomienda no usar paños mojados, siendo lo más conveniente la limpieza en seco.

Luego de transcurrido ese período, la limpieza se realiza únicamente con un paño húmedo, sin necesidad de usar ningún tipo de ceras ni otros productos.

Uno de los ensamblajes más populares en la actualidad es el tornillo, que desplazó al tradicional de clavos. El ensamblaje con tornillos tiene varias ventajas sobre los clavos, la unión resulta más sólida, la colocación es más sencilla y segura, y resulta una unión ideal para el montaje y des montaje de muebles.

Elementos del ensamblaje con tornillos:

Entre los elementos del ensamblaje con tornillos se destacan los tornillos y el destornillador.

• El tornillo: el tornillo es una pieza de sujeción, de forma cilíndrico-cónica, con el cuerpo atravesado por un resalte helicoidal (conocido como rosca macho), y rematado por una cabeza. Hay casi tantos tipos de tornillos como de usos.

La invención del tornillo se atribuye al sabio griego Aquitas de Tarento (428-347 aC). La rosca de los tornillos se adapta perfectamente a la de las tuercas, que son la parte hembra de la unión.

Tipos de roscas: o Triangulares: empleadas para tornillos de fijación, para facilitar el montaje. Pierden estanqueidad en la unión.

o Trapezoidales: tienen forma de diente de sierra y son simétricas. Empleadas para transmisión de fuerza.

o Redondas: empleadas para elementos que reciben impactos, por ser las de mejores cualidades mecánicas. Su fabricación es dificultosa por ello son costosas y poco empleadas. o Roscas finas: empleadas cuando la distancia de sujeción es corta (chapas, tubos, etc).

El diseño de la cabeza del tornillo obedece a la necesidad de tener un punto de apoyo para la colocación del mismo. Hay cabezas de seguridad con formas variadas, que no pueden desenroscarse con un destornillador tradicional. Tenemos cabezas: redondas, hexagonales, cilíndricas y avellanada.

Los tornillos pueden ser de diversos materiales: hierro, hierro galvanizado, acero, bronce, etc.

• El destornillador: es una herramienta que supuestamente habría sido creada en el siglo XV, pero que cuenta con un antecedente creado por Leonardo Da Vinci. El destornillador está compuesto por tres partes: -mango, es la parte para la sujeción, puede ser de diferentes materiales: madera, resinas plásticas, PVC, metal. Debe tener forma anatómica, cuando es de uso eléctrico, debe tener un mango de material aislante.

-cuerpo: es una barra de metal de variado grosor y longitud, de acuerdo al tipo de destornillador.

-cabeza: es la parte que se introduce en el tornillo para hacerlo girar. Tiene diferente forma según el tipo de tornillo que atornille.

Tipos de destornilladores: hay distintos modelos de destornillador, según el tipo de tornillo que deban atornillar, el más común es el plano, luego están los Philips o estrella, que permiten una mejor sujeción a la cabeza del tornillo y requieren de menor esfuerzo. Los tipo Allen o hexagonales, y también los de horquilla o acodados.

Las bisagras son herrajes compuestos por dos piezas unidas o combinadas, que se articulan por un eje común, y se colocan entre dos elementos de madera para articularlos. Estas piezas permiten el movimiento de rotación entre dos elementos, generalmente uno fijo y otro móvil.

Las bisagras son el elemento de unión indispensable para las aberturas, sin las cuales, éstas no tendrían las características funcionales que poseen. Pero también se usan para unir tapas, hojas de un mismo elemento, como ser las hojas de un biombo, las jambas de una ventana, etc.

Existe una amplia gama de estos elementos de unión, entre ellos las bisagras de cazoleta, que se utilizan para puertas de muebles y permiten un ajuste de su posición. A su vez, se presentan en diversos formatos:

– bisagra recta: se emplea para puertas de muebles, para que solapen por fuera de éstos unos 16mm.
– bisagra acodada: empleada para solapes de 8mm.
– bisagra súper acodada: utilizada para puertas ubicadas a ras de mueble.

Colocación de bisagras de cazoleta:

Para determinar la cantidad de bisagras necesarias para un trabajo, debemos hacer un cociente entre el largo de la puerta y el peso. Teniendo en cuenta que no podemos colocarlas a una distancia mayor de 60cm entre una y otra.

Para colocar las bisagras de cazoleta necesitaremos una serie de herramientas: atornillador, broca de madera y destornillador de mano.

Primero elegiremos el número de bisagras que vamos a colocar y marcamos su ubicación. En general se colocan a una distancia de 8cm de los bordes y esquinas. Deben guardar una distancia de 3mm con el canto de la puerta. Marcamos la posición y perforamos los orificios para los tornillos, empleando la broca.

Para instalar las bisagras, comenzaremos primero con la bisagra inferior y seguiremos con la superior, para que de este modo, la puerta nos quede ubicada correctamente. Luego colocaremos todas las bisagras intermedias que sea necesario, comenzando desde abajo hacia arriba. En caso de aberturas horizontales o en otra posición, comenzaremos por colocar las bisagras de los bordes y luego las intermedias.

Con la bisagra ubicada en su posición, la atornillamos a la puerta. Cuando se coloca la parte del mueble, se realizan los ajustes necesarios. Para ajustar la bisagra, apretamos los dos tornillos que están ubicados en la parte recta, el que está más al exterior es el que hace que la puerta salga o entre más. El de más abajo, permite ubicar la puerta más a la derecha o a la izquierda.

La pintura decorativa sobre madera tiene una larga tradición en el trabajo decorativo. Desde la antigüedad hasta nuestros días, algunas de las técnicas persisten casi invariables.

Esta modalidad de pintura tiene gran popularidad en las tareas de bricolaje, tanto en el diseño de muebles, como en el de objetos decorativos. Existen muchos estilos de pintura de madera.

Técnicas de pintura decorativa sobre madera:

Para pintar sobre madera, primero debemos preparar las superficies. Lijamos y limpiamos la madera, para eliminar impurezas y cualquier elemento extraño.

Cuando no empleamos tintes, debemos aplicar una capa de imprimación para sellar los poros de la madera. La tinta se distribuye sobre la madera al natural. En caso que de deseemos darle un fondo de color plano, aplicamos el color con una paletina, para fondos texturados utilizamos esponja.

La textura con esponja se aplica sobre el fondo de color, impregnando la esponja en pintura y retirando el exceso en un papel. Con ligeros toques cubrimos la superficie de manera que se vea el color de base. Podemos sustituir la esponja por un trozo de plástico, papel o trapo. También podemos dar la textura sin cambiar de color, de modo que al realizar la pintura decorativa, simplemente nos queda la base texturada en color uniforme.

Sobre el fondo preparado aplicamos el diseño que deseemos, en el estilo decorativo preferido.

Estilos de pintura decorativa sobre madera:

Hay muchos estilos de pintura decorativa, cada uno con sus particularidades y encanto.

• Estilo francés: este estilo característico de la Provenza, se aplica principalmente al decorado de muebles. Los elementos característicos son: el uso de los colores pastel, gris y dorado; la aparición de motivos reiterados como las ramas de olivo, espigas de maíz, rosas, cintas y flor de lis.

• Estilo Rosemaling: que significa pintar rosas, este estilo pertenece a Noruega entre el siglo XIV y XVIII.

• Estilo country: estilo norteamericano caracterizado por la simpleza de los motivos, el uso de la geometría, y la simbología en el empleo de los colores.

• Estilo mediterráneo: este estilo de la región mediterránea está muy emparentado con la decoración de la cerámica. El uso predominante del blanco y el azul que proviene de la pintura cerámica del estilo Talavera de la Reina. Los motivos provienen de la naturaleza, con hojas, trenzas, olas, etc.

• Estilo inglés: también conocido como Roses and Casttles. Su nombre proviene del tipo de decoración empleada para embarcaciones que surcan los canales británicos.

La madera es un material natural de gran belleza que se emplea en la construcción y en la decoración. Es un material muy noble por sus cualidades físicas, es aislante térmico, acústico, resistente, bello, pero es muy sensible a las manchas. Para mantener el aspecto agradable de la veta de la madera y evitar su deterioro, es necesario realizar un mantenimiento constante.

Existen muchísimos elementos que pueden manchar la superficie de las maderas y para combatir a cada uno, existe un truco específico.

Consejos para limpiar madera:

Antes de desmanchar la madera, debemos determinar qué sustancia ocasionó dicha mancha, para emplear el mejor procedimiento para eliminarla, pues podríamos empeorar el resultado si equivocamos el producto.

Hay diversos elementos caseros que son muy eficaces en la eliminación de manchas y que nos permiten restituir el aspecto original de la madera sin mucho gasto.

• Cera de vela: para limpiar los restos de cera debemos retirarla por completo. Para ello colocamos un cubo de hielo sobre la cera y luego la desprendemos. Con una espátula de plástico eliminaremos cualquier resto posible. Frotamos con crema pulidora y eliminamos los residuos con un papel absorbente y luego con un paño humedecido. Finalmente aplicamos lustramuebles para hidratar.

• Aureolas de tazas y vasos: raspamos suavemente con lija al agua de grano muy fino, seca. Luego frotamos con un paño untado con mayonesa, hasta que la mancha desaparezca.

• Rasguños en el barniz: se disimulan con pomada para calzados.

• Manchas de agua: se aplica lustramuebles y se da brillo con un paño.

• Grasa: calentamos la zona con secador de pelo y presionamos con papel absorbente sobre la mancha de grasa. Limpiar con agua oxigenada y lustrar la madera.

• Óxido: preparamos una solución de 50gr de bioxalato potásico en un litro de agua caliente y lo aplicamos a la superficie manchada.

• Lustre acumulado: periódicamente se aplica cera a las superficies de madera para su mantenimiento, pero con el tiempo se acumula formando una capa opaca y grasosa, lo que hace necesario eliminarlo antes de lustrar nuevamente. Para ello usamos una solución de medio vaso de vinagre en medio vaso de agua, y lo frotamos con un paño hasta retirar los restos de lustre.

• Pegatinas: frotamos con amoniaco hasta retirar la mancha. Aplicamos limpia cristales.

Para la colocación de baldas emplearemos diversos sistemas de fijación capaces de resistir el peso propio de los estantes y su contenido. También debemos asegurarnos de que las paredes, muros o tabiques de muebles que vayan a sostener las baldas, sean capaces de soportar el peso que deseamos cargarles, de modo que su instalación sea segura y duradera.

Las baldas pueden ser de diversos tipos de madera según el uso que les demos, maderas macizas, conglomerados o contrachapados. Los métodos de fijación pueden ser visibles (escuadras, tirantes) o invisibles (pinos, tacos).

Consejos para la colocación de baldas:

Primero debemos elegir el tipo de balda, su material y soporte, de acuerdo al peso que deba soportar, podemos utilizar escuadras de madera, metal o sistemas de fijación invisibles, estos últimos sólo sirven para estantes que soporten poco peso. .

Para la colocación de baldas necesitaremos emplear ciertos elementos:

– soportes y sistemas de fijación
– tacos para muros macizos o huecos
– taladro y brocas
– nivel y regla
– destornillador y tornillos
– lápiz y punzón

Para instalar baldas sobre paredes:

-Determinamos la altura donde las situaremos.
-Colocamos uno de los soportes y marcamos la posición de los tornillos.
-Con el taladro perforamos los orificios donde colocamos los tacos.
-Atornillamos el soporte.
-Presentamos la balda para ubicar los soportes restantes. Utilizamos el nivel para asegurarnos que el estante quede perfectamente horizontal.
-Colocamos todos los soportes y los atornillamos.
-Atornillamos la balda a los soportes.

Para instalar baldas en armarios:

-Determinamos la posición en que irá la balda. Marcamos con lápiz en uno de los lados la posición de los tornillos de los listones de soporte, o de los pinos, según deseemos soporte visible o invisible.
-Perforamos los orificios.
-Presentamos la balda y nivelamos para marcar la posición del soporte del otro extremo. Perforamos.
-Colocamos el otro soporte.
-Instalamos la balda, que no necesita fijarse al soporte.

Pero a diferencia de la madera natural, cuando estas maderas ya están pintadas con colores como el blanco, el negro o cualquier otro tono y no vemos ninguna madera natural, el proceso de hacer una masilla para este fin es diferente.

En este caso es conveniente utilizar polvos de talco industriales o polvos de bebé, y masilla plástica que se vende ya preparada con su endurecedor, el mismo que se vende en ferreterías y carpinterías.
Esta masilla con su endurecedor viene en color gris plomo, y el uso del endurecedor realmente acelera el proceso de secado, y cuando está hecho, es realmente muy firme.

Pasemos al segundo paso

Con una simple herramienta, conocida en muchos oficios como paleta, son fáciles de encontrar en cualquier ferretería. Las hay de plástico y de metal, con mangos de goma o de madera, y con diferentes tamaños o anchos de hoja.

Dadas las circunstancias, sería una buena idea en tu caso empezar con una llana de 2″, te recomiendo las metálicas; teniendo en cuenta que puedes optar por una más pequeña dependiendo del tamaño o la superficie.

Por supuesto, un truco para trabajar este tipo de masilla con su endurecedor vendido para que la mezcla no sea tan dura, puedes aplicar talco industrial; y para imitar la arcilla con la que vas a trabajar, aplica el mismo color de la mancha, por lo que debes ser idéntico a lo que vas a trabajar; es decir, una pasta o masilla del mismo color.

Además del tinte, puedes aplicar polvos de talco con una capa transparente. Quedará muy bien si sólo es blanco, para otros tonos, aplica el tinte según el barniz que vayas a utilizar.

¿Cómo se aplica la mezcla de madera y cuánto tiempo tarda en secarse?

Ahora que has aprendido a hacer tu propia masilla que realmente imita el tono de la madera, llegamos a un punto importante: cómo aplicar la masilla para madera y cómo saber cuánto tardará en secarse.

Lo explico aquí, así que pasemos al segundo paso, que consiste en utilizar una sencilla herramienta manual llamada espátula. Las puedes encontrar en cualquier ferretería, son de plástico y metal con mango de goma o madera, con diferentes tamaños o anchos de hoja.

Así que en su caso, sería una buena idea preparar toda la mezcla que necesita para sus proyectos de restauración.

Para ello, aplique la mezcla directamente sobre la zona a fijar con la escobilla de goma y cubra las imperfecciones pasando la herramienta manual por la zona a fijar. Esta mezcla tiene una proporción de 50:50 para madera pintada o natural.

Se puede decir que el tiempo de secado de la masilla depende de varios factores:

La mezcla correcta debe ser homogénea y no líquida.
Entorno o clima, en las regiones con clima templado, el estuco se secará más rápido, a diferencia de las regiones frías que requieren más tiempo de secado. Puede secar entre 4 y 12 horas.
Con el endurecedor, se secará más rápido. Alrededor de 1 hora.
Pues bien, amigo que leas este post es lo único que te queda para ponerte a trabajar con todos estos consejos y trucos. Si te ha gustado este artículo, compártelo en tus redes y ayuda a otros a recibir estos consejos.

A continuación te explicamos cómo hacer masilla casera para madera que imite el tono o el color de la madera con la que estás trabajando o que esté disponible en tu localidad o país.

Consejos muy útiles
Es realmente muy fácil y muy útil, lo explicaré por etapas utilizando diferentes trucos:

Primero coge el polvo, las virutas o el serrín que se desprende de la madera que estás trabajando, y luego recoge en un recipiente una cantidad que sea proporcional a las secciones o partes de la madera que hay que masticar.

Si eres nuevo en el trabajo de la madera, no te preocupes, este polvo se obtiene de la propia madera lijándola a mano o con lijadoras.

Luego puedes optar por mezclarlo con cola de carpintero (cola blanca), que es el método clásico o tradicional que utilizabas antes. De hecho, no lo descarto, el problema es que cuando el pegamento se seca, es un poco blanco.

 consejos útiles
Lo que recomiendo es mezclar el polvo con lo que vayas a utilizar para pintar, es decir, puedes mezclarlo con pintura o laca, o cualquier otro producto que vayas a aplicar según sea tu caso.

Si vamos a pintar un mueble con laca, es aconsejable combinar el polvo con la laca transparente para hacer una masilla, ya que la protegeremos mejor, y a diferencia de trabajar con cola blanca, el tono es un poco más acaramelado u oscuro que con la cola blanca.

No te asustes, confía
Pero no te asustes si lo ves muy oscuro durante la preparación, porque cuando se seca realmente imita el tono de la madera, y sirve como masilla casera para trabajar tus muebles.

Como en el caso anterior, si pensamos pintar con barniz, mezclamos el polvo con el barniz transparente.

Nota: Al utilizar la pintura y el polvo, recomiendo que sea espesa, porque si es acuosa o muy líquida, la masilla no funcionará bien. Recuerde que, técnicamente, puede mezclarlo con el producto con el que está protegiendo la madera.